Nada en dos platos
por Kevin Harrington-Shelton
El chiquishow en la Asamblea ilustra cómo el gobierno piensa que nosotros no pensamos: todo lo reducen a un rejuego de jingles e imágenes mediáticas. El HD-presidente –que hoy no tenía nada que hacer más que verificar el cuórum– se aprovechó de las televisoras convocadas para el Mensaje Presidencial, para meter una cuña que intentara cambiar la percepción de un Órgano Legislativo indolente y por corrupto.
El mandatario Juan Carlos Varela hizo otro tanto, intentando imbuir “fe y confianza” en un gobierno que hace más agua que la Ampliación. Pero ni en Narnia lo lograría un discurso como este –el que omitió los principales problemas que preocupan a la Nación. ¿Qué se esconde?
Es más, continuando su acostumbrada falta de la transparencia que nunca deja de predicar, el Señor Presidente no permitió que se le formularan preguntas ni a su entrada, ni a su salida, de la Asamblea. Esto no es transparencia. Habitualmente, cuando no está leyendo de lo escrito preparado su personal de “Comunicaciones”, es que –sin quererlo– suelta prenda y así de ñapa nos enteramos lo que pasa en Panamá. Fue en la salida de otro acto la semana antepasada que los jubilados preocupados se enteraron que él pensaba atender el asunto del resquebrajado Fondo de Pensiones del Seguro Social –“DESPUÉS que termine la Ampliación”… Pero hoy –cuando debió tocar sobre ambos temas– no tuvo el valor de hacerlo. Como tampoco se atrevió a explicar la minería a cielo-abierto en Petaquilla –cosa que (también) “olvidó” en la Conferencia en París que citó varias veces en éste Mensaje.