“Realizaremos todos los esfuerzos que la Constitución y las leyes nos permiten para lograr la renuncia o salida anticipada del profesor Gustavo García de Paredes…”

Declaración de Santiago

por el Movimiento de Adecentamiento de la Universidad de Panamá (MOVADUP)

Nosotros, los delegados del Movimiento de Adecentamiento de la Universidad de Panamá, provenientes de las provincias de Chiriquí, Colón, Herrera, Los Santos, Veraguas y Panamá, hemos deliberado ampliamente sobre la desastrosa realidad que padece la institución bajo sus actuales administradores, realidad que refleja una política conscientemente orientada hacia el deterioro de la educación superior pública con el fin de favorecer un proyecto de deseducación que abandona la integralidad académica y la integridad administrativa, desconoce la educación superior como un derecho y estimula su privatización al mismo tiempo que favorece a una burocracia cuya corrupción es imposible de ocultar, perjudica los intereses de la academia y hace grave daño a los estudiantes, siembra el terror entre los profesores y administrativos y deprime, de forma sistemática y dolosa, la presencia y proyección de la Universidad de Panamá en la vida nacional.

Tras haber concluido las deliberaciones, hemos resuelto firmemente no cejar en nuestros esfuerzos para revertir esta aciaga situación, totalmente injusta e inmerecida para la Universidad de Panamá. Por lo tanto, declaramos solemnemente lo siguiente:

1. Fomentaremos la conciencia ciudadana en el sentido de que esta reivindique, como natural, su derecho soberano, supremo e indiscutible a participar en los procesos de la Universidad de Panamá.

2. Realizaremos todos los esfuerzos que la Constitución y las leyes nos permiten para lograr la renuncia o salida anticipada del profesor Gustavo García de Paredes del cargo de rector de la Universidad de Panamá, no solo por su responsabilidad en la triste situación que se ha descrito, sino porque su permanencia en el cargo ha demostrado ser perjudicial para las investigaciones que se adelantan contra la corrupción campante en esta institución.

3. No claudicaremos en el impulso y seguimiento, por todos los medios a nuestro alcance, de los evidentes casos de corrupción en los que está involucrada la actual administración de la Universidad de Panamá.

4. Apoyaremos, con todas nuestras fuerzas, a los miembros del MOVADUP que son víctimas de los atropellos de la administración universitaria actual, especialmente a quienes adelantan casos en los tribunales contra los abusos perpetrados por ella.

5. Acogeremos y ayudaremos, con todos los recursos legales y políticos de que disponemos, a quienes recurran al MOVADUP por estar siendo acosados, perseguidos y vejados por orden de las autoridades de la Universidad de Panamá.

6. Nos esforzaremos al máximo para lograr el sufragio efectivo y que sea aprobada la ley que reinstaura la NO REELECCIÓN del rector, decanos y directores de Centros Regionales, pues más de veinte años de asociación de los mismos individuos han creado un impresionante edificio de corrupción que da primacía a intereses particulares y promueve un sistema delincuencial que se ha adueñado de la Universidad de Panamá.

7. Procuraremos alcanzar que, mediante ley, se disminuyan los poderes casi omnímodos de los que goza el rector, que lo convierten en juez y parte en los órganos de cogobierno y han propiciado que deje impunes a personas que han cometido delitos en la Universidad de Panamá mientras castiga a los que denuncian las irregularidades, manipule el otorgamiento de descargas horarias y de cátedras incluso sin concurso, insulte sin consecuencias para él a los estudiantes, desacate órdenes judiciales, negocie opinión favorable a instituciones de educación superior privada que no soportan acreditación y un largo etcétera.

8. Lograremos que se reforme el sistema de ponderación electoral de manera que ningún estamento alcance, por sí solo, una mayoría absoluta y concluyente, dado que el desequilibrio del sistema actual promueve el comercio abierto y encubierto de las conciencias y es el origen estructural del clientelismo. Esta reforma deberá incluir el voto de los egresados de la Universidad de Panamá, puesto que su capacidad académica es indiscutible y son el vínculo natural e inmediato de esta institución con la comunidad que la sostiene.

9. Aseguraremos que el Organismo Electoral Universitario sea independiente, que sus miembros no se deban al influjo pernicioso del rector de turno para ocupar sus puestos y que el trabajo de este organismo sea debidamente supervisado por el Tribunal Electoral de la República.

10. Propondremos elevar rigurosamente, mediante ley, el perfil académico y personal de cualesquiera aspirantes a los cargos de rector, decanos y directores de centros regionales, de forma que sean elegidos a estos puestos panameños con realizaciones académicas de la más alta calidad y de integridad fuera de toda duda.

11. Efectuaremos todos los esfuerzos posibles para lograr la descentralización de la Universidad de Panamá, dado que su actual administración desatiende dolosamente las necesidades de las regiones, les impide su crecimiento y el desarrollo de su oferta académica y favorece de este modo que la educación universitaria privada se expanda a costa del estudiantado, sobre todo del más humilde, que debe realizar un esfuerzo económico tremendo si desea estudiar una carrera que, debido a lo antedicho, no ofrece la Universidad de Panamá.

12. Apoyaremos decididamente la creación, mediante ley, de una Universidad Pedagógica sobre la base del Instituto Pedagógico Juan Demóstenes Arosemena, que funciona en la Escuela Normal Juan Demóstenes Arosemena, proyecto que fue truncado por la mezquindad y compromisos políticos espurios de la administración de la Universidad de Panamá en contubernio con el gobierno corrupto de Ricardo Martinelli y su ministra de Educación, Lucy Molinar.

13. Nos constituiremos en plataforma permanente que sirva a la ciudadanía como observatorio y punto de apoyo de sus iniciativas respecto de la Universidad de Panamá que promuevan una educación superior popular, de alta calidad y de elevada conciencia social y solidaria.

¡El pueblo panameño recuperará su universidad!

¡Por la excelencia académica, adecentamiento universitario!

Santiago de Veraguas, 25 de julio de 2015.

Con tales sinverguenzuras, ¡con razón que la OECD nos mantiene en toditas sus listas!

Los suplentes cobrarán “legalmente”

por Kevin Harrington-Shelton

No hay bellaco, donde no hay soquete.

Los padawanes parlamentarios no tienen por qué preocuparse: nuestra Corte Suprema es tan corrupta, que sin bendecirá el pago de sus salarios — “por factores imponderables extra-jurídicos”. Y eso hasta lo consignó –textualmente– como explicación de un fallo irracional sobre otro texto constitucional distinto, que resultaba diáfano para el resto de los mortales (no-interesados) en 1993.

Hoy es similarmente diáfano su artículo 156: “…no podrán ACEPTAR ningún empleo público remunerado”. No dice “COBRAR”. No obstante, un diputado suplente aereó airado un papel que (según él dijera en el Pleno) era un precedente en que la Corte definiría lo que RECIBÍAN en 2011 a título de “gasolina” en la Asamblea no era “salario”, sino “emolumentos”. De ser así, los cínicos de la Corte sin duda aprovecharán para reiterar su propia versión de seguridad jurídica….

Este tipo de bellaquerías propicia la pérdida de confianza en las instituciones.

Recuerda un caso en Inglaterra. A inicios de 2014, la policía anunció que “Se revisan partes noticiosos de cobros ilícitos de prestaciones en la Cámara de los Lores. Podemos confirmar que un varón de 73 años asistió a una convocatoria en una subestación policial del éste de Londres, a ser indagado respecto de una alegación de fraude.” Una presunción de inocencia ausente en los juicios promovidos en los medios –selectivamente– por el presidente Juan Carlos Varela, aunque a ello “obliga” nuestra legislación vigente. El par del reino inglés resultó condenado por algo que, aunque en Panamá no es ilegal, bien podría interesar a nuestros Padres de la Patria. Un tabloide había seguido a Lord Hanningfield, documentando que cobraba las dietas de $500 diariamente, aunque permaneciera pocos minutos en el sitio de trabajo. En Panamá los principales Y los suplentes cobran igual, si se pavean (cosa MUY frecuente).

Nuestra Asamblea tiene un Código de Ética por hacer ver que lo tienen; aunque no compara en lo moral ni en detalle con las 23 páginas digitales del británico, que allá sí se cumple. En poder adquisitivo, allá ganan la tercera parte de lo que perciben los nuestros, no tienen carros exonerados, y su blindaje sólo alcanza lo dicho dentro del Pleno.

Y les podrá interesar, que a los ingleses no los pueden botar jamás, sin la necedad de re-elegirse….

La batalla del puente de Calidonia

por Olmedo Beluche

En julio se conmemoran 115 años de la histórica Batalla del Puente de Calidonia, en que los liberales panameño-colombianos fueron masacrados en la Guerra de los Mil Días.

Quisiera aportar a la reflexión sobre la famosa batalla del Puente de Calidonia, ocurrida el 26 de julio de 1900, en la que fueron aniquiladas las fuerzas liberales a las puertas de la ciudad de Panamá.

Cabe preguntarse: ¿Por qué, después de los contundentes éxitos de las tropas liberales en el interior, el general Emiliano Herrera se lanzó a un ataque suicida, enviando a sus tropas a través del puente desguarnecido frente a los parapetos de ametralladoras de los conservadores, ubicadas en las proximidades de lo que hoy es la Plaza 5 de Mayo?

La respuesta la encuentro en el papel activo que tuvieron los cónsules de las potencias representadas en Panamá: Francia, Inglaterra y muy especialemente el de Estados Unidos. Según se desprende del libro “El Panamá Colombiano”, de Araúz y Pizzurno, estos cónsules exigieron tanto a conservadores como liberales que no fueran afectados por el combate, ni la ciudad, ni el ferrocarril. Por supuesto, la amenaza subyacente era la intervención militar extranjera contra quien pusiera en peligro esos intereses extranjeros, apelando a la manera como EEUU entendía el Tratado Mallarino-Bidlack.

El 21 de julio forzaron al general Albán, conservador, a presentar batalla en Corozal, donde fue derrotado por Herrera. Teniendo que retirarse el primero a la ciudad de Panamá donde montó sus barricadas.

Con la complicidad de la Compañía del Ferrocarril, y de su gerente, el coronel Shaller, que jugaría un papel central en la Separación de 1903, se trasladan tropas conservadores desde Colón para reforzar a Albán. La Compañía y el cónsul norteamericano, lejos de ser neutrales como pretendían, jugaron un papel activo apoyando a los conservadores.

Previo al asalto liberal de la ciudad, el cónsul norteamericano se reunió en Perrys Hill (Perejil) con Emiliano Herrera, reiterándole la exigencia de no afectar la ciudad.

A mi juicio son estas presiones del cónsul norteamericano las que llevan a Herrera a presentar el nefasto esquema de ataque, que en pocas horas aniquiló a las huestes liberales (200 bajas entre muertos y heridos).

Esta me parece es la razón por la que, en 1901-1902, cuando las tropas liberales se recuperaron, gracias al papel de Victoriano Lorenzo, que transformó la guerra política en guerra social, campesino-indígena, llevando a los liberals a controlar todas las provincias del Istmo, menos la capital, tampoco intentaron nunca tomar la ciudad de Panamá.

El problema para la cabal comprensión de este acontecimiento es que la historia oficial panameña deja por fuera el papel jugado por las potencias imperialistas y reduce toda la explicación a una simplista contradicción entre “panameños’ y “colombianos”.

No hay duda de que hubo una lucha por el mando liberal entre Belisario Porrras y Emiliano Herrera, y posteriormente, Benjamín Herrera. Pero en este caso el factor determinante es la intervención norteamericana en toda la Guerra de los Mil Días.